Cúter, cortador o cuchillo de oficina son tres nombres por los que conocemos a este útil de corte imprescindible no solo en la oficina, sino también en el hogar. Este instrumento es útil para cortar papel, cartulina, cartón, fotografías, goma EVA y plástico, entre otros materiales.
Características de un cúter
El cúter es un instrumento de corte que posee una hoja con un borde afilado en ángulo agudo, es decir, una arista cortante, que sirve para cortar y hacer incisiones en papel, cartón y cartulina. También puede rebanar y seccionar materiales blandos como el plástico, la goma EVA o el corcho.
La cuchilla u hoja del cúter está fabricada con acero. El acero es una aleación (mezcla) de hierro con otros elementos que mejoran sus propiedades. Al mezclarlo con carbono, el acero aumenta su dureza y se vuelve más elástico: corta con más facilidad y se vuelve menos quebradizo. Cuando se añade cromo y níquel a la hoja de un cúter, la aleación resultante es el acero inoxidable: un metal aún más duro que el acero ordinario y no vulnerable a la corrosión.
El cúter actual fue inventado por Olfa, un fabricante japonés que continúa fabricando algunos de los mejores cuchillos de oficina. Con el cúter adecuado se pueden dividir, hendir, cortar, tajar y guillotinar derivados del papel y materiales para manualidades. Lo que diferencia la hoja del cúter de otros instrumentos de corte (hacha, formón, sacabocados, hoz, escoplo, cincel, podaderas, tijeras) es que su hoja se desliza a lo largo de un canal y, en muchos casos, posee segmentos tronzables que restituyen el extremo afilado de la hoja.
¿Qué cúter comprar?
Por menos de un euro se pueden comprar cortadores de plástico con cuchilla ancha o estrecha. Estos son útiles para abrir una caja de embalaje cortando el precinto, ajustar la medida de una cartulina escolar eliminando sus laterales o cortar plástico forralibros. Los más económicos son los de color amarillo o naranja con tronzacuchillas de color negro en la base.
Los cúteres baratos de plástico tienen un inconveniente: la propia cuchilla desgasta y rompe la embocadura de plástico del cúter como resultado del uso. Esto ocurre, sobre todo, cuando soporta demasiado esfuerzo. Por ejemplo, cuando se corta cartón grueso y rígido de doble canal. Los cúteres con puntera reforzada de metal evitan en parte este problema. Son más caros que los anteriores. Pero la camisa metálica en la que se desliza la hoja mejora la sujeción de la cuchilla y lo hace más apropiado para cortar materiales gruesos y resistentes.
Aún mejores que los anteriores son los cúteres con cuerpo 100 % metálico. Estos cortadores están indicados para cortar materiales muy resistentes como el cartón de triple canal, el suelo y el revestimiento de vinilo para paredes o las planchas gruesas de corcho, por poner algunos ejemplos. Con ellos se puede transmitir un esfuerzo de corte mucho mayor sin miedo a que se rompa el cuerpo del cúter. Los de hoja ancha trapezoidal son los más caros y son idóneos para bricolaje y manualidades; los de cuchilla estrecha son muy asequibles y útiles en la oficina.
¿Hoja recta o trapezoidal?
La ventaja de las cuchillas rectas para cúteres es que permiten renovar el filo. La hoja está marcada con segmentos que se separan fácilmente con la ayuda del tronzacuchillas. Así, se renueva el filo de la punta y, de esta manera, se alarga la prolonga la vida útil de la cuchilla. Como resultado de tronzar los segmentos, llega un punto en el cual la hoja queda inservible por ser demasiado corta.
Por el contrario, las cuchillas trapezoidales nunca son segmentadas, es decir, no se pueden tronzar. Son más cortas que las anteriores y la longitud del filo es menor. Esto significa que, cuando se desafilen, habrá que sustituirlas. No obstante, como disponen de dos puntas, antes de hacerlo se pueden voltear para disfrutar de un nuevo filo antes de su reemplazo.
La gran ventaja de las cuchillas trapezoidales para cúteres es que son más gruesas y, por tanto, mucho más resistentes. Esto las hace más seguras para cortar materiales difíciles, dado que el riesgo de que se partan durante el corte es mucho menor. De hecho, este es precisamente el inconveniente de las hojas rectas: se parten cuando se expone una gran longitud de cuchilla y se flexionan en exceso. En ambos casos se deben usar gafas de seguridad cuando se vayan a cortar materiales duros o aquellos que puedan proyectar partículas.
Escalpelos de precisión
Un instrumento muy diferente al cúter de oficina o bricolaje es el escalpelo o cuchilla de precisión. La primera diferencia de este útil con respecto a los cúteres es que su cuerpo es siempre cilíndrico, digamos con forma de lápiz. Ello permite sujetarlo más cerca de la punta cuando así sea oportuno; pero también se puede sujetar desde atrás cuando no se requiera tanta precisión y se prefiera optar por más libertad de movimiento durante el corte.
La segunda diferencia es que su cuchilla no se desliza a través de su cuerpo, sino que se acopla en la punta, generalmente con un sistema de rosca. Estas cuchillas están extremadamente afiladas y son mucho más pequeñas que las de los cúteres convencionales. Además, el ángulo de su punta es muy agudo, lo que ofrece precisión en lugares de difícil acceso, ranuras estrechas, etcétera.
Y la tercera y última diferencia es que dado que su cuchilla siempre está expuesta, con muchos de estos bisturís se incluye un capuchón protector para cubrirla. De esta manera, se puede guardar el bisturí en un cubilete portalápices o en un estuche escolar sin miedo a sufrir un accidente y sin estropear el filo de su cuchilla.
Los bisturís o escalpelos son muy útiles en ciertas tareas de manualidades y bricolaje. Son idóneos para vaciar el interior de cartulina y papel, practicar ventanas o perfilar siluetas.